En este día:
No permita que las situaciones adversas de la vida o los desafortunados errores de los humanos acaben con el don divino que hay en usted, y que le fue concedido por la gracia y la voluntad divina. No olvide que fue Dios quien lo llamó y no lo hizo para que fracasara. Usted y su liderazgo hacen parte de los planes y los sueños de Dios.